

Por_ Pamela Marfil
A propósito del término crecimiento exponencial, puede ser didáctico referirse a la Leyenda del Noroeste de India del sirviente Sissa. Ante la solicitud de su Brahmán (sacerdote hinduista) de idear algún juego que lograra entretenerlo, inventó el Tablero de ajedrez. Rai Bhalit, satisfecho, le ofreció cualquier recompensa. El modesto hombre expresó: “me conformaría con que me pagues un grano de trigo por el primer cuadrado, dos por el segundo, cuatro en el tercero, ocho en el cuarto, y así sucesivamente”. Sorprendido, el Brahmán aceptó rápidamente sin calcular que al término de la secuencia de los 64 casilleros del tablero, la cifra ascendería a los impresionantes 18,4 trillones de trigos que no conseguiría, aunque reuniera todo el trigo de su nación. Entonces, imposibilitado de pagar la deuda, lo mandó ejecutar. Y así es cómo el comportamiento exponencial de un fenómeno puede llevar a cifras siderales.