

Uno de los ejes fundamentales de la XXVIIIa versión del festival internacional es la presencia de mujeres artistas de América Latina. Ellas aportan una mirada de género, independiente y política, con obras interdisciplinarias y jugadas que, sin duda, sacarán de la comodidad a los espectadores.
Por_ Marietta Santi Fotos_ Santiago a Mil

«Album / The Pose», de la argentina Constanza Macras, mezcla danza, música, texto y video para indagar en las formas de autorepresentación en la era digital.
Uno de los ejes más importantes de la parrilla programática de la XXVIIIa edición del Festival Internacional Santiago a Mil, que se realizará del 3 al 24 de enero, es Mujeres Creadoras Latinoamericanas. Las invitadas hurgan en la interdisciplina –desde la danza, el teatro, el video, la performance y las instalaciones– para reflexionar en torno a la problemática de género y su construcción política y social. Son mujeres cuyo discurso provoca y remece.
#Volveraencontrarnos es el lema de esta versión, que desarrollará una programación marcada por la pandemia. Es así como en los 151 espectáculos agendados habrá un cruce entre lo virtual y lo presencial, por supuesto cumpliendo con los protocolos sanitarios establecidos. Habrá un énfasis en las producciones on line, radioteatros y novedosas experiencias urbanas al aire libre.
El foco dedicado a las Mujeres Latinoamericanas está encabezado por el colectivo chileno Lastesis, considerado entre las 100 personalidades de 2020 por revista «Time» y cuya performance «Un violador en tu camino» fue premiada por el Círculo de Críticos de Arte de Chile como una de las mejores propuestas de 2019, además de recorrer el mundo hermanando a mujeres de diversas nacionalidades.

La directora, performer, compositora y dramaturga Lola Arias se une al artista sonoro Ulises Conti en la intervención urbana «Formas de caminar con un libro en la mano».
El colectivo presentará una coproducción junto a Fundación Teatro a Mil, Parque Cultural de Valparaíso y la HAU de Berlín, que se centrará en las teorías feministas de Judith Butler, Paul B. Preciado y María Lugones, entre otros. La propuesta es colaborativa y se posicionará en el espacio público, combinando performance, danza, música, diseño gráfico y textil, poesía, historia y ciencias sociales. En el elenco participarán alrededor de 100 mujeres de distintas edades que alzarán la voz contra el patriarcado colonialista.
Argentina tendrá una fuerte presencia a través de cinco reconocidas exponentes del arte de avanzada: Luciana Acuña, Lola Arias, Aliana Álvarez Pacheco, Constanza Macras y Cecilia Bengolea.
Acuña, bailarina, coreógrafa y codirectora del Grupo Krapp, es la autora junto a Alejo Moguillansky de la instalación dancística «Les revenants». Se trata de seis solos de danza grabados en edificios históricos desocupados de Santiago, que se proyectarán en diferentes lugares de la ciudad. La idea es mostrar cuerpos que regresan de la muerte o del limbo, por eso el nombre, que significa “los que regresan”.
Lola Arias es una vieja conocida, que impactó al público chileno con obras de docuteatro como «Mi vida después» y «El año en que nací». La directora, performer, compositora y dramaturga se une al artista sonoro Ulises Conti en la intervención urbana «Formas de caminar con un libro en la mano». El público recibirá un ejemplar con instrucciones entre sus páginas, y se le pedirá leerlos de pie, acostado, acompañado o en soledad; y también escuchando música o caminando (10, 16, 17, 24 y 25 de enero, lugar por definir).
En el mismo espíritu se inscribe «Jardín Sonoro volumen 2», de Aliana Álvarez Pacheco, estrenada en el Jardín Botánico de Buenos Aires. El proyecto invita a los participantes a escuchar obras breves escritas por mujeres, a la vez que recorren un jardín guiados por una aplicación en el teléfono celular. Son seis los textos, todos vinculados de alguna forma con la Naturaleza.
Ciudad, memoria y feminidad
La coreógrafa trasandina Constanza Macras debuta en el festival con «Album / The Pose», coproducción chileno-alemana que mezcla danza, música, texto y video para indagar en las formas de autorepresentación en la era digital. Se trata de la fusión de dos obras que abordan la dificultad de documentar la memoria en la era de la digitalización, tomando como hito principal el momento en que nuestra cultura transitó de la era analógica a la digital. Poniendo en contraste ambas dimensiones, Macras dividió el espectáculo en tres partes, llevando su trabajo con el cuerpo y la memoria a un nivel más íntimo, al poner en tensión el cuerpo de los intérpretes, la memoria, las imágenes y el concepto de representación (18, 19 y 20 de enero, en GAM).
Para finalizar la embajada trasandina, el trabajo internacional de Cecilia Bengolea –artista multidisciplinar que usa el video, la danza, la performance y la escultura– se desplegará en una interesante retrospectiva. Una de las piezas consideradas es «Erika Stitches», solo coreografiado por Bengolea para la bailarina japonesa Erika Miyauchi, quien articula un lenguaje virtuoso y emocional en el cruce del ballet y el dance hall (podrá verse del 15 al 21 de enero en teatroamiltv.cl). También conoceremos su trabajo audiovisual con «Favorites positions», serie de videos de esculturas anima- das que sugieren un cuerpo sin fronteras, un ser totalmente líquido. La artista escaneó su cuerpo en sus posiciones favoritas y creó con ese material un ser en 3D. El video de siete minutos se proyecta en una pantalla fantasma, que crea la ilusión de un cuerpo holográfico flotante y fluido (gratis durante todo enero en teatroamiltv.cl).
En el video «Lightning dance», Bengolea investiga sobre la influencia de las tormentas eléctricas en el imaginario del cuerpo. Para hacerlo contó con jóvenes jamaicanos que bailaban coreografías en solitario y en grupo mientras caía la lluvia. En la obra, los bailarines suben al escenario a bailar dance hall jamaicano, estilo altamente sexualizado que la coreógrafa considera con poderes de sanación (gratis durante todo enero en teatroamiltv.cl).
Otra realización de la argentina que veremos es «Shelly belly inna real life», filmado en Jamaica entre 2015 y 2019, colaboración entre la coreógrafa, la escena del dance hall en Kingston y Bog Walk. El traba- jo, narrado a través del movimiento y la música, sigue el lenguaje del estilo de baile desde sus selváticos ritmos hasta la coreografía (gratis durante todo enero en teatroamiltv.cl).
Desde Brasil arribarán dos invitadas. La escritora, directora de teatro y cineasta Christiane Jatahy regresará a Santiago a Mil para presentar «O Livro» (El libro). Y la artista Janaina Leite mostrará «Stabat Mater», conferencia performática que sube al escenario a su madre y a un actor porno para analizar la representación histórica de lo femenino y lo masculino, además de lo que entendemos por mater- nidad (22, 23 y 24 de enero en M100).
Las uruguayas Florencia Lindner y Jimena Ríos intervendrán Santiago con «Ciudad invisible», recorrido por varios puntos de la urbe con teléfono en mano. Y su compatriota, la coreógrafa y artista visual Tamara Cubas, exhibirá «Esculpir el silencio», instalación realizada con sal del desierto de Atacama.

La uruguaya Tamara Cubas exhibirá «Esculpir el silencio», instalación realizada en el desierto de Atacama.
El teatro paraguayo dirá presente de la mano de la directora y dramaturga Paola Irun, quien ofrecerá funciones de «Nombre», montaje que narra una escalofriante historia sobre la trata de personas (17 al 24 de enero, teatroamiltv.cl).
La conferencia performática «No soy unicornio» marcará el debut en Chile de las destacadas artistas cubanas Martica Minipunto y Joanna Montero, en un diálogo sobre la memoria histórica de su país y su propio proceso creativo (18 al 24 de enero, teatroaMil.tv).
Por Chile, a Lastesis se suman la directora Stephie Bastias y su compañía La Trama con «El convento», coproducción de Fundación Teatro a Mil y el Teatro Camilo Henríquez. También estarán las reconocidas Manuela Infante y Trinidad González, quienes estrenarán en este festival de marcado sello femenino. Las chilenas se sumarán al poderoso discurso de sus compañeras latinas, que profundiza no sólo en el género sino también en la importancia de la Naturaleza y del quehacer ciudadano.

«Erika Stitches», solo coreografiado por Cecilia Bengolea para la bailarina japonesa Erika Miyauchi.